Reglas dolorosas

Molestias

La presencia de reglas dolorosas se conoce como dismenorrea. El dolor puede iniciarse horas antes de la regla y desaparecer al presentarse, persistir durante todos los días o no aparecer hasta el segundo o tercer día de regla.

Se localiza en la parte baja del vientre, pero puede extenderse por todo el vientre e, incluso, por el periné, el recto, la región lumbar y los muslos. Puede ser en forma de retortijones o simplemente como una especie de pesadez.

Además, pueden existir nauseas, vómitos y desmayos. A veces, las molestias son tan intensas, que la afectada no puede realizar las actividades cotidianas.

Desde la pubertad

Cuando el dolor afecta desde las primeras reglas recibe el nombre de dismenorrea primaria o esencial, pues no se debe a ninguna enfermedad.

En general, aparece después de unas pocas reglas sin molestias y para que se produzca es imprescinfible que exista ovulación.

Su causa no está clara, pero influye la herencia (en la mitad de los casos, la madre también sufrió esta clase de dismenorrea). Se cree que pueden intervenir diversos factores, como el retraso en la relajación de la entrada del útero (que, normalmente, debe producirse pocos días antes de la relga); un déficit de circulación en el útero (producido por sus contracciones durante la regla) y la exageración de estas contracciones por una alteración hormonal o por el aumento de unas sustancias llamadas prostaglandinas.

Por último, también influyen factores emocionales, como la llegada de la feminidad en la pubertad, conflictos familiares, etc. En algunos casos, el motivo es alguna malformación del desarrollo del útero.

Con posterioridad

En este caso, el trastorno se conoce como dismenorrea secundaria porque es consecuencia de alguna lesión o enfermedad. Entre las posibles causas, citaremos los quistes de ovario, las desviaciones, los miomas o los pólipos del útero, las infecciones genitales, las adherencias entre órganos genitales y tejidos vecinos (formadas como consecuencia de inflamaciones, operaciones, abortos o partos) y la presencia de la llamada endometriosis, que consiste en el desarrollo de la mucosa de la matriz en sitios anormales, entre ellos dentro de su pared muscular o en los ovarios.

Un DIU demasiado grande, también puede ser motivo de reglas dolorosas.

Soluciones

Para aliviar el dolor, lo mejor son los antinflamatorios, que incluso pueden prevenirlo si se adminitran antes de que aparezca. También pueden ser útiles los antiespasmódicos, los relajantes musculares, los vasodilatadores y la acupuntura.

Como las dismenorreas primarias no se dan si no hay ovulación, para prevenirlas resulta muy eficaz bloquearla, tomando la píldora anticonceptiva. En las secundarias, siempre que sea posible debe tratarse la causa.